Qué locura tu mirada
Perdida y viajante
Sin buscar encuentra
Inocencias las conviertes
En perversidades te vas y
No reparas ni te importan
Si lloran en la confusión
Ese mundo de ilusiones
Qué maligno es tu ser
Y qué adictivo es tu discurso
Qué vacía es el alma
Y qué completa es esa falta
Qué psicosis sufriste al leer
Esas líneas y qué paz
Tuviste cuando escuchaste
Su voz frágil quebradiza
Repetía incansable
Palabrerías camufladas
En los pensamientos que ella
Leyó solo, solo para él
Qué maligno es tu ser
Y qué adictivo es tu discurso
Qué vacía es el alma
Y qué completa es esa falta
Qué psicodelia tu amor y
Qué paranoia tu existencia